¡La respuesta es no! La conjuntiva es una membrana que recubre la parte blanca del ojo y la parte interna de los párpados, por lo que hace un fondo de saco que impide que la lentilla se “pierda” o “se vaya hacia atrás.” Sin embargo, una lentilla puede enrollarse, doblarse, o moverse dentro del ojo o “esconderse”. Si no consigues encontrarla pon abundante lubricante en el ojo, evita
tocarlo en exceso y no utilices objetos para intentar retirarla. Si no consigues localizarla, acude a un especialista.
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