Suele ser común a la mayoría de pacientes de baja visión. Toda
patología ocular puede cursar con deslumbramiento, se manifestará
de diferentes formas según la afectación de las células de la retina
pero será igualmente incapacitante.

Enfermedades como la DMAE, cataratas, retinopatía diabética,
miopía magna, distrofias maculares como la enfermedad de
Stargardt, o la maculopatía viteliforme.
Las alteraciones de campo central son las más fáciles de
contrarrestar con ayudas de baja visión porque existen muchas
opciones en el mercado.

Enfermedades como el glaucoma, retinosis pigmentaria, retinopatía
diabética o las neuropatías entre otras.
Son alteraciones más difíciles de mejorar, pero existen dispositivos de
ayuda para estos pacientes que están revolucionando la vida de
quien padece estas enfermedades.

Son alteraciones del campo visual por sectores definidos. Depende
de la zona en la que esté la lesión, habrá un tipo de lesión u otra.
Pueden suceder tras un accidente cerebrovascular o ictus. La
rehabilitación visual mejora mucho la calidad de vida de estos
pacientes.